miércoles, 15 de agosto de 2012

La enésima guerra mundial




-Fue una guerra terrible, el sol doraba los desnudos cuerpos de los caídos del bando de los desenamorados, no habían caído en la muerte, mucho peor, cayeron en el amor, víctimas del ataque de los enamorados. En plena calle daban buena cuenta de su amor mientras esa lluvia de luz los tostaba lentamente.

Enamorados contra desenamorados, esa fue la Enésima Guerra Mundial.

Recuerdo cómo fueron cayendo los desenamorados, uno a uno se doblegaron a las poesías, las canciones, las caricias, besos, abrazos y miradas con los que bombardeaban los enamorados.

Los desenamorados en cambio se dedicaron a destruir el cielo, ese en el que vivían los enamorados. Tan brutales fueron las miles de bombas de realismo con las que atacaron que el firmamento comenzó a resquebrajarse, y acabó por caérseles encima a ellos mismos.

-¿En qué bando luchabas tú abuelo?

-Es difícil de saber, cambié tantas veces de bando… Javier “el traidor” solían llamarme mis compañeros de pelotón, pero…en el amor y en la guerra no hay normas, mucho menos en una guerra de amor.

-¿Y quién ganó la guerra abuelo?

-La guerra aun no ha acabado hijo, aun no ha acabado…

No hay comentarios:

Publicar un comentario